Museo de Metales Preciosos Precolombinos
La red de Museos Municipales:
Un paseo imaginario por el Museo de Metales Preciosos Precolombinos
El 15 de julio de 1983, se inaugura el Museo de metales preciosos precolombinos, ubicado en la zona norte de La Paz, a unos pasos de la plaza Rioshinio, en la tradicional calle Jaén Nro. 777, casa que perteneciera a uno de los próceres de la independencia Don Apolinar Jaén, quien lucho junto a Pedro Domingo Murillo en la Revolución de julio de 1809.
Es uno de los museos más visitados del complejo de museos municipales siendo su primer Director el señor Carlos Urquizo Sossa y posteriormente se hace cargo el señor Gonzalo Iñiguez Vaca Guzmán.
Actualmente cuenta con cuatro salas de exposición:
La sala introductoria: donde se puede apreciar una vitrina múltiple, en la que destacan objetos líticos como puntas de flecha, elementos utilizados en el laboreo de minerales como: morteros, manos para su molienda, yunques para el laminado y cinceles. También se puede ver una pequeña muestra de cerámica ordenada de manera cronológica.
La sala del oro: denominada así por la configuración de bóveda de banco, además por su óptimo sistema de seguridad que se les da a las piezas elaboradas en oro, que conserva este museo. Varias vitrinas adosadas como individuales, muestran el trabajo de piezas ceremoniales como ser diademas, pectorales, collares, idolillos, placas y cintas, además de mostrar una hermosa colección denominada, el Tesoro de San Sebastián, por haberse hallado en la Colina de San Sebastián hoy conocida como “La Coronilla” en Cochabamba. Consiste en varias piezas como una diadema decorada con piedra sodalita, collares y brazalete, una tutuma (vaso para tomar chicha), además de un ponchillo decorado con placas circulares. Así mismo en la vitrina central se pueden observar objetos como diademas repujadas y grabadas con incrustaciones de sodalita encontradas en Kalasasaya.
La sala de metales y objetos orgánicos: donde se exponen varios objetos de metal argentífero que son principalmente de carácter ceremonial, se puede apreciar una tumba funeraria que corresponde al periodo Post Tiwanaku o la de los señoríos aymaras. Se aprecian topos, diademas pectorales cintas que servían como elementos decorativos y una máscara funeraria hecha en plata laminada, recortada y repujada procedente de la cultura Tiwanaku. El trabajo en bronce y cobre se ve reflejado en varias figuras antropomorfas y zoomorfas, diademas, vasos, tumis, tupus, lauraques y hachas las cuales sirvieron para la guerra y como objetos utilitarios. Además se muestran cráneos precolombinos con deformación artificial, textiles, objetos de madera, cestería y otros.
La sala de la cerámica: El Museo cuenta con piezas de cerámica pertenecientes a diferentes culturas y periodos, en ellas se ven reflejadas el grado de desarrollo cultural alcanzado por los habitantes de nuestra región. Es así que en esta sala se podrá apreciar objetos pertenecientes a los diferentes periodos de la cultura Tiwanaku, tales como kerus, sahumadores, lebrillos, tazones y otros utilizados tanto en rituales como de modo utilitario.
Una de las piezas líticas más atrayente hoy en día por las y los turistas extranjeros es la “fuente magna”. Una fuente que en sus bordes tiene características de la cultura Tiwanacota y al interior tiene grabados de la cultura sumeria.
El museo forma parte del complejo de museos y su patrimonio está constituido por objetos arqueológicos de data prehispánica, en materiales como: oro, plata, bronce, cobre, hueso, madera, textil, cestería, cerámica y líticos, pertenecientes a diversos periodos y culturas que florecieron desde hace aproximadamente 3.000 años.
El proyecto del Museo del Oro, surge de una idea original del eminente arqueólogo boliviano Carlos Ponce y de la receptividad del Alcalde de entonces Don Mario Vaca Guzmán, quienes mediante convenio firmado en 1972 encomendaron a las arquitectas: Torrez y García, la remodelación e implementación del recinto para adaptarlo a museo.
Las colecciones que forman parte del museo fueron pertenecientes a: Fritz Buck, Mario Mercado Vaca Guzmán, INAR, Museo Nacional de Arqueología, Museo del Oro, Velasco Medina y Diez de Medina.
Finalmente, esta construcción es una excelente muestra de vivienda “dieciochesca” (perteneciente o relativo al siglo XVIII) con dos plantas, patios en desnivel, corredores, arquería, galerías con balaustrados de madera, puertas y portón de época. Los dos patios tienen pisos encasillados con piedra manzana negra y blanca, además de huesos de llama, único testimonio de la época en nuestra ciudad. El elemento arquitectónico colonial contrasta con la moderna museografía implementada en sus salas de exhibición.
Fuentes consultadas:
Quispe, Jaime. Responsable del Museo de Metales Preciosos Precolombinos. (Texto y recopilación) La Paz, Bolivia.
Real Academia Española (2024). "Diccionario de la lengua española". Localizable en dle.rae.es/dieciochesco?m=form. Descargado en 09 enero 2024.